Ya desde pequeños,ansiabamos el momento en el que sonaba ese timbre,el timbre que daba comienzo ha esos 3 meses de descanso,el timbre que daba comiendo al verano en sí.
Aún recuerdo esos días en la playa,nada más llegar descalza,ibas corriendo hasta la toalla porque la arena quemaba y esperabas a que tu mamá te pusiera protección para no quemarte y te tirabas de golpe al mar,poniéndome como una osa,enterrandome en la arena,y cuando salias tenias arena en todos lados,haciendo castillos de arena con un cubo y una pala.Comiendome un frigopie mientras miraba a la gente jugar al voleyball. Jugando en el mar a saltar las olas,y cogiendo conchas para hacer collares,cuando nadaba despreocupada en el mar,hasta que mi madre me tenía que llamar,porque ya estaba muy alejada de la orilla.Comiendo sardinas que tanto me gustaban en los chiringuitos..Pero lo peor sin duda era la hora de irse..la hora de decirle adiós a la playa,y cuando te tenias que meter debajo de la ducha,para quitarte los restos de arena del cuerpo.
Hecho de menos esos días de verano...(:
